De mi vida, de lo que me gusta y de la hermosa gente que comparte escenario conmigo
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Hace muchos años que conozco la comida japonesa
En mi primera visita a París que fue un premio por objetivos de ventas en Olivetti, empresa que guardo entre mis emotivos momentos, obtuve la plaza de comercial compitiendo con 42 compañeros que tenían un aspecto muy saludable y y los veía a todos más capaces para ganar esa única plaza.
La empres ate pagaba la ida y la estancia en Barcelona del curso de 15 días de duración, siempre que te "graduaras" para cumplir tu cometido eficazmente, de no lograr la nota adecuada, tenias el billete de vuelta a tu lugar de origen y allí se acababa la relación, de aprobar el curso tenias un contrato desde el día que subiste al avión para desplazarte a Barcelona.
Conseguir ese puesto era muy importante para mi, llevaba unos meses casado y mi esposa estaba embarazada de mi primer hijo, cuando estábamos en el hotel, los compañeros solo hablaban a qué discoteca íbamos a ir, yo denegaba la opción y decía que no me sentía bien.
El monitor nos expuso la agenda del curso y que en las pruebas finales nos podían preguntar sobre la cantidad de muelles o tornillos que tenia una determinada máquina, aunque estaba prohibido llevarse las máquinas a la habitación , me permitió hacerlo e inclusive me dejo un destornillador, me enfrasque con ellas, en determinado momento me parecía que era yo el que la invento (las preguntas no fueron por eso que esperaba).
De más esta decir que fuí la mejor nota de aquellos 50 candidatos y que no conocí ninguna discoteca en esa ocasión.
El segundo viaje que gane en Olivetti fue a París y en el hotel que estábamos alojado, había un restaurante de comida japonesa, toda una novedad en aquellos tiempos, era muy caro, ni siquiera se me paso por la cabeza el sentarme a comer en esa ocasión.
Muchos años más tarde invite a un cliente en Madrid y al decirle que eligiera me dijo ¿puede ser comida japonesa? "Por supuesto" y disfrute enormemente y me hice fan del Sushi, Sashime y demás platos, hasta el día de hoy que cuando me dicen Donde vamos? no dudo en decir ."japones"
La empres ate pagaba la ida y la estancia en Barcelona del curso de 15 días de duración, siempre que te "graduaras" para cumplir tu cometido eficazmente, de no lograr la nota adecuada, tenias el billete de vuelta a tu lugar de origen y allí se acababa la relación, de aprobar el curso tenias un contrato desde el día que subiste al avión para desplazarte a Barcelona.
Conseguir ese puesto era muy importante para mi, llevaba unos meses casado y mi esposa estaba embarazada de mi primer hijo, cuando estábamos en el hotel, los compañeros solo hablaban a qué discoteca íbamos a ir, yo denegaba la opción y decía que no me sentía bien.
El monitor nos expuso la agenda del curso y que en las pruebas finales nos podían preguntar sobre la cantidad de muelles o tornillos que tenia una determinada máquina, aunque estaba prohibido llevarse las máquinas a la habitación , me permitió hacerlo e inclusive me dejo un destornillador, me enfrasque con ellas, en determinado momento me parecía que era yo el que la invento (las preguntas no fueron por eso que esperaba).
De más esta decir que fuí la mejor nota de aquellos 50 candidatos y que no conocí ninguna discoteca en esa ocasión.
El segundo viaje que gane en Olivetti fue a París y en el hotel que estábamos alojado, había un restaurante de comida japonesa, toda una novedad en aquellos tiempos, era muy caro, ni siquiera se me paso por la cabeza el sentarme a comer en esa ocasión.
Muchos años más tarde invite a un cliente en Madrid y al decirle que eligiera me dijo ¿puede ser comida japonesa? "Por supuesto" y disfrute enormemente y me hice fan del Sushi, Sashime y demás platos, hasta el día de hoy que cuando me dicen Donde vamos? no dudo en decir ."japones"
Cuando gane al squash
Siempre me han gustado muy poco los deportes, compramos una acción del Club Natación Metropole y por "la novedad" me apunte a Tenis, pero no era lo mio y me apunte al squash, que enseguida me recordó mi poca gracia en los deportes, pero un día toco la flauta y gane el partido, y el amigo
contrincante en ese momento me dijo: "Me ganaste ya que hoy no me encuentro muy bien" y no pude reprimirme y le conteste: "Hoy te gane porqué fui mejor que tú, es problema tuyo el estar en la mejor forma"
contrincante en ese momento me dijo: "Me ganaste ya que hoy no me encuentro muy bien" y no pude reprimirme y le conteste: "Hoy te gane porqué fui mejor que tú, es problema tuyo el estar en la mejor forma"
jueves, julio 13, 2017
Lo que ha cambiado un cateterismo
Hace muchos años, calculo que 25 han pasado desde aquellos primeros cateterismos que se realizaron en Las Palmas de Gran Canaria, mi gran amigo Francisco Lagares, jefe de radiología del hospital Insular Materno-infantil, hizo el curso de intervencionista y me pidió ayuda, a la que me preste voluntario, era un monitor en blanco y negro, se puso unas gafas enormes y lo vi en su tarea, no recuerdo que hubiera informes de por medio.
Ayer tenia una cita y recordaba aquella experiencia, pero esta vez me llevaron a una sala inundada de tecnología, me acostaron en una camilla metálica en la que 3 asistentes me conectaron a la maquinaria enorme que me rodeaba por todos lados, de repente comenzó la fiesta, sentí al robot pegado a mi cuerpo moviéndose con diligencia, senti dolor en el brazo y se lo dije, una voz me contesto que estaba buscando el lugar idóneo para encontrar mis arterias (no pude evitar pensar en el hombre aquel buscando una arteria y esta máquina lo encontró en unos instantes, pero no le parecio muy fácil, ya que la escuche vendarme el brazo y pincharme la ingle, no pudo percibir cuando entro en mis arterias, ya que una voz me anuncio que ya "estaba".
Al hombre le cuesta encontrar una arteria y esta máquina hizo todo en 15/20 minutos, hasta me diagnostico inclusive.
Ayer tenia una cita y recordaba aquella experiencia, pero esta vez me llevaron a una sala inundada de tecnología, me acostaron en una camilla metálica en la que 3 asistentes me conectaron a la maquinaria enorme que me rodeaba por todos lados, de repente comenzó la fiesta, sentí al robot pegado a mi cuerpo moviéndose con diligencia, senti dolor en el brazo y se lo dije, una voz me contesto que estaba buscando el lugar idóneo para encontrar mis arterias (no pude evitar pensar en el hombre aquel buscando una arteria y esta máquina lo encontró en unos instantes, pero no le parecio muy fácil, ya que la escuche vendarme el brazo y pincharme la ingle, no pudo percibir cuando entro en mis arterias, ya que una voz me anuncio que ya "estaba".
Al hombre le cuesta encontrar una arteria y esta máquina hizo todo en 15/20 minutos, hasta me diagnostico inclusive.
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